Gerina - Amor Del Bueno

Lo primero que me atrapó al escuchar a Garina fue la forma en que su voz parece encender un espacio entero. No se trata sólo de cantar, sino de envolvernos con una calidez que invita a abrir el corazón. La producción apuesta por la sencillez: una guitarra que sostiene el pulso con delicadeza y coros que se expanden como si fueran chispas de fuego. Esa mezcla logra que cada nota se sienta honesta, casi como una confesión al oído.

Lo interesante es cómo la canción nos coloca en esa frontera entre la timidez y el deseo de gritar lo que sentimos. No es un tema que se consume de fondo, es de esos que obligan a pensar en la persona que nos hace temblar las manos y sonreír sin razón. El videoclip refuerza todo esto, capturando gestos y detalles que hablan de un amor que no pretende ser perfecto, pero sí verdadero.

Garina demuestra que el Latin Pop puede ser más que fórmulas: puede ser un lugar donde una voz desnuda, una guitarra y un par de coros bastan para contar una historia que nos atraviesa.